viernes, 29 de julio de 2011

ESCUELA CLÁSICA

Escuela clásica (desde 1776 hasta mediados del siglo XIX)

ORIGENES:

La economía clásica es una escuela de pensamiento económico cuyos principales exponentes son Adam Smith, Thomas Malthus y David Ricardo. Es considerada por muchos como la primera escuela moderna de economía.
La publicación del libro de Adam Smith titulado Una investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones en 1776 se considera normalmente como el comienzo de la economía clásica. La escuela estuvo activa hasta mediados del siglo XIX. 
Los economistas clásicos intentaron y en parte lograron explicar el crecimiento y el desarrollo económico.
Además reorientaron la economía, alejándose del análisis previo que se centraba en los intereses personales del gobernante y un interés basado en las clases sociales (el capitalismo se encontraba en pleno auge tras salir de una sociedad feudal)
Identificaron la riqueza de la nación como el producto nacional bruto. Smith veía este producto nacional como el trabajo aplicado a la tierra y al capital.
Fue desplazada en gran parte por escuelas marginalistas, que derivaba su concepto de valor de la utilidad marginal que los consumidores encontraron en un bien en lugar del costo de los gastos envueltos en producirlo. Sin embargo, algunas de las percepciones clásicas fueron incorporadas en la escuela neoclásica, que comenzó en el Reino Unido a partir del trabajo de Alfred Marshall.

IDEAS PRINCIPALES:
v      Se defendía la propiedad privada, los mercados y se creía en la libre competencia; manifestándose esto último en su aceptación por lo esencial de la búsqueda del bienestar propio como medio para aumentar la prosperidad de toda la sociedad y la famosa “mano invisible”
v      Se afirmaba que a medida que se aumenta la fuerza de trabajo y el capital que se utiliza para labrar la tierra, disminuyen los rendimientos o, como decía Ricardo, “superada cierta etapa, no muy avanzada, el progreso de la agricultura disminuye de una forma paulatina”.
v      Malthus planteaba la nota pesimista de la escuela clásica, al afirmar que las esperanzas de mayor prosperidad se escollarían contra la roca de un excesivo crecimiento de la población, salvo que esta tendencia se controlara, o por la naturaleza o por la propia prudencia de la especie. La solución era, para Malthus, el retraso de la edad nupcial, lo que produciría la reducción inmediata del volumen de las familias
v      Mill confiaba más en la posibilidad de educar a la clase obrera para que limitase su reproducción de lo que lo hacían Ricardo y Malthus. Además, era un reformista que quería gravar con fuerza las herencias, e incluso permitir que el gobierno asumiera un mayor protagonismo a la hora de proteger a los niños y a los trabajadores. Fue muy crítico con las prácticas que desarrollaban las empresas y favorecía la gestión cooperativa de las fábricas por parte de los trabajadores. Mill representó un puente entre la economía clásica del laissez-faire y el Estado de bienestar
v      Se aplicó la “ley de Say”, que sostiene que el riesgo de un desempleo masivo en una economía competitiva es despreciable, porque la oferta crea su propia demanda, limitada por la cantidad de mano de obra y los recursos naturales disponibles para producir. Cada aumento de la producción aumenta los salarios y los demás ingresos que se necesitan para poder comprar esa cantidad adicional producida




Esta escuela mostró el nacimiento del socialismo. A través de un correcto análisis fue en contra del liberalismo, y la decadencia del capitalismo.
Se muestra, a través de ideas mal llamadas “pesimistas”, la problemática que enfrentarían los estados de no adoptar ciertas medidas que más tarde el socialismo perfeccionaría, pero a pesar de lo expuesto anteriormente continuó la idea de del egoísmo y la fe en su productividad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario